Efectos del frío súbito en los bonsais.
frio en bonsai center sopelana

Efectos del frío súbito en los bonsais.

 

Pufff que frio. 

De súbito nos hemos dado de bruces con el
crudo invierno.

 
Las temperaturas se han desplomado en cuestión de horas, ha
llovido a mares y el granizo ha caído como si se abriera el cielo.
Todo tan de sopetón que los bonsáis tropicales y algunos más
sensibles al frio las han pasado canutas en cuestión de un par de días.
Cuando un bonsái percibe el frio progresivamente no tiene
problemas para adaptarse pero cuando el frio llega así de improviso es otro
cantar.



Los olmos chinos, los ficus, eugenias, serissas, cupheas…
lo pasan fatal.
Se me enfrió el bonsái y ahora ¿Qué?
Las temperaturas tan bajas con el añadido del granizo, destruyen
el follaje más expuesto. Si las bajas temperaturas se prolongan durante varios días
pueden llegar a provocar la muerte del bonsái.

¿Qué hacer con nuestro bonsái tropical ante frío inesperado, incluso ante
una helada?

 

Si sabemos que vienen estos fríos lo meteremos en el
interior. Una vez pasado el riesgo de la helada, basta con volver a sacar el
bonsái al lugar donde se encontraba.
Si el frio viene de repente y no hemos podido protegerlo
antes,  el daño en las hojas será
inmediato. Podemos utilizar periódicos, una sábana, una malla anti heladas
para, tapar el bonsái durante las horas más frías del día y así minimizar los
daños.
Estos daños son desgraciadamente imposibles de arreglar.
Pasaran unos días e iremos viendo como las hojas de nuestro ficus o de nuestro
olmo se oscurecen hasta volverse negras.
Si vemos que el ficus tira las hojas negras de forma espontánea
es síntoma de que está muy muy vivo y el mismo elimina lo que no le sirve.

 

Si las hojas negras permanecen, es síntoma de que el bonsái
está bastante afectado.

 

PASOS A SEGUIR
  • Si vemos que el bonsái tiene verde al rascar (la mayoría de
    las veces solo se producen daños en las hojas) esperaremos a que comience a
    brotar.
  • En ese momento podaremos todas las zonas necrosadas cortando
    por encima de las zonas donde vemos nuevos brotes.
  • Más adelante y a medida que crece eliminaremos las ramas
    nuevas que no nos sirvan, pinzaremos las que interesan para ir equilibrando el
    verde y dirigiendo el crecimiento hacia las partes que se habían quedado vacías
    de follaje.
  • Cuando comience a brotar aplicaremos un abono muy diluido o
    una ampolla de vitamina. Esto ayudara a la recuperación de nuestro bonsái.
Saludos cordiales desde Bilbao

 

Beti Andrés

Estudié Biología en la Universidad del País Vasco EHU-UPV. Muy pronto me enamoré de los Bonsáis y quise  trabajar , viajar y  aprender todo lo posible de los grandes maestros del bonsái. Y ahora, 30 años después, sigo aprendiendo y compartiendo todo lo que sé sobre cuidado y diseño de bonsáis. Desde Bonsai Center Sopelana colaboro con grandes maestros y a la vez amigos como Manuel Germade , Taiga Urushibata, entre otros.

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