Membrillero chino o japonés
Una foto de hoy mismo de este Karin |
Es la única especie del género Pseudocydonia. Es un árbol
caducifolio o semiperennifolio de la familia de las Rosáceas, nativo del este
de Asia, China.
No tiene espinas y se distingue de la Cydonia oblonga,
nuestro membrillo procedente del Cáucaso porque el primero tiene las hojas
aserradas. No confundir tampoco con el género Chaenomeles, estos últimos tienen
espinas y las flores agrupadas.
Listo para podar |
Después de la Poda |
Como veis, lo dejamos desnudito en febrero de 2011. Tocaba rezar y vigilar si ramificaba bien o mal.
Floración, bastante discreto, aparece en abril-mayo, después
de las hojas. Su color varía desde el rosa pálido a rosa brillante como
especímenes. Las flores son auto-fértiles, un pie es suficiente para obtener
membrillos.
Las flores masculinas
tienen una especie de rabito que se conecta directamente a la rama de la flor.
Las flores femeninas
después de la “pequeña cola”, un “bulto” en la flor,
abultamiento que se convierte en el fruto si se deja crecer.
Va ramificando poco a poco |
Las flores no brotan a la vez. Es curioso ver una flor aquí,
al de unos días otra y así durante parte de la primavera.
Podas suaves. Para conseguir frutos dejaremos crecer los brotes durante
toda la primavera. Cuando la corteza de las ramas cambia de color pasando de
verde claro a casi marrón podaremos
dejando solo dos o tres hojas. Esto se hace a finales de la primavera.
Luego a finales de otoño podaremos los brotes que han
resultado de esa poda anterior. Podaremos siempre por delante de una yema de
flor. Al año siguiente tendremos un montón de flores y frutos.
Florecen por los brotes laterales de la base en ramas del
año anterior.
Despues de podar a finales de la primavera vuelve a brotar, lo dejaremos hasta el otoño. |
El defoliado hace que las ramas densifiquen y las hojas
disminuyan de tamaño. Quitar residuos de las flores y eliminar durante la
primavera las hojas demasiado grandes para evitar las plagas. Los chupones
debilitan el bonsái así que a la mínima hay que eliminarlos.
Corteza de un membrillero |
La corteza desconchada con tonos amarillos y marrones es
preciosa. Cuidado con los áfidos, cochinillas y ojo a los golpes ya que los
chancros están a la orden del día.
Sebas, ojalá te sirva.
Saludos cordiales desde Bilbao
Beti Andrés