Tosho Bonsai, apuntes

Los trasplantes no pueden esperar. 

No hay días de fiesta. Domingo y a trabajar.

Se trata de un bonsai de enebro japonés que ya he trabajado varias
veces.

Bonsai Juniperus rigida, detalle

Los enebros crecen vigorosamente sobre todo en las
puntas.  Necesitan imperiosamente que la
luz penetre en el interior porque de otro modo se oxidan las  agujas y acaban muriendo. El riego es
fundamental. Les encanta el agua. La falta puntual de agua sobre todo en
invierno provoca el amarronamiento de las puntas.

Es conveniente pulverizar el follaje periódicamente.

En otras especies utilizadas para bonsái y más si son coníferas
aconsejamos abonar poco y a menudo. Los enebros necesitan abono orgánico a
discreción. Únicamente tendremos cuidado cuando llueve mucho ya que las bolas
se disolverán muy deprisa pudiendo colapsar las raíces por excesiva
concentración de nutrientes.

Aclarado y preparado para el trasplante

Este ejemplar es un bonsái bastante maduro. A base de
realizarle metsumi continuamente ( pinzar los brotes antes de que se abran
completamente) se consigue unas capas muy compactas y densas sobre todo en las
zonas más exteriores por eso debemos limpiar y aclarar las ramas para que entre
la luz. Ese es el motivo que de vez en cuando me pinche para aclararlo.

De esta manera la rama crece, engorda, se poda, ramifica, se
pinza, densifica. Las ramas compactas adoptan forma de abanicos más juntos y
compactos que en el caso de los juníperos de escama.

  En el 2013 presentamos el tema del aclarado y pinzado en
este bonsái. Pinchando AQUÍ veréis el artículo completo. Este año le tocaba trasplante.
El sustrato estaba pulverizado, drenaba mal y se intuía la cantidad de raíces
que había como así fue.
Detalle de la oquedad en la base
La misma maceta. El bonsái es muy sinuoso y con mucho
movimiento así que una maceta mate ovalada con el borde hacia adentro y patas
daban un conjunto elegante, estilizado y femenino a pesar de ser una conífera.

Se ha eliminado todo el sustrato anterior y esta vez he
decidido mostrar el hueco que el árbol tiene en el nebari
. Le da un aspecto
frágil pero elegante a la vez.  Las
raíces eran abundantes. Una buena poda quitando alguna raíz gruesa siempre
teniendo cuidado de no eliminar aquellas que alimentas las venas vivas del
árbol.

Una sujeción con detalle para que el bonsái no se mueva y
kyriu, mucho kyriu cribado.
En la parte superior pusimos el mismo sustrato con el grano
un poco más pequeño.

Previamente a todo el proceso del trasplante procedimos a la
limpieza de la madera. Pistola de agua a presión.
Despues del aclarado
Riego con suavidad en el sustrato y en las agujas

No entro a valorar si hay que
limpiar las vetas vivas o no. A unos les gustan limpias y pulcras y a otros no.

A mí me parece que este bonsái pide que las maderas vivas
estén limpias hasta que se pueda apreciar ese rojo característico.
Un buen riego por arriba y por abajo y a seguir.

Así esta ahora despues del trasplante

 Saludos cordiales desde Bilbao
Beti Andrés

Beti Andrés

Estudié Biología en la Universidad del País Vasco EHU-UPV. Muy pronto me enamoré de los Bonsáis y quise  trabajar , viajar y  aprender todo lo posible de los grandes maestros del bonsái. Y ahora, 30 años después, sigo aprendiendo y compartiendo todo lo que sé sobre cuidado y diseño de bonsáis. Desde Bonsai Center Sopelana colaboro con grandes maestros y a la vez amigos como Manuel Germade , Taiga Urushibata, entre otros.

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