Haya; Omote y Ura

Hola

Hoy llego un poco tarde. Casi
se acaba el martes pero el trabajo me ha llevado unas cuantas horas.
Esta es una historia
peculiar. Hace un par de semanas conocí a una persona que vino a visitarme y se
enamoro de un olivo monstruo que yo tenia.

Ahora el trueque esta de moda así
que yo conseguí hacerme con un haya (pedazo de haya) que me gusto con solo
verla en foto y él se llevo mi olivo dejando sitio a un nuevo bosque.

El haya me pareció muy
bonita, gruesa, muy compacta, chaparrita y muy bien cuidada.  Únicamente tenía un par de brotaciones o tres
en la maceta pero esta muy fuerte. Ha sido cultivada en fibra de coco, un
sustrato interesante en zonas muy húmedas pero el tema raíces quedara para otro
año.

Mi  amigo decidió rápidamente
un frente basándose  en la conicidad,
estrechamiento paulatino y sobre todo en que la parte superior y el follaje se inclinaban
hacia ese frente así que alambro el árbol siguiendo esas líneas.
Cuando ha llegado a mis
manos, me ha parecido un sacrilegio dejar escondido el enorme  shari natural y esas raíces tan particulares.

Así que ni corta ni perezosa,  he decidido darle la vuelta y cambiar el frente.
En primer lugar he
empezado abriendo el shari en su parte superior para disimular el engrosamiento
excesivo del tronco. Este engrosamiento contrasta mucho con la rama que hace de
nuevo ápice. Por algún motivo el árbol  murió
en altura y una rama creció de forma un poco grotesca dando lugar a un nuevo ápice
mucho más delgado, cilíndrico y que se ve excesivamente.

He considerado cortar
parte de ese nuevo ápice y bajar la altura ya que resulta difícil disimular
esas curvas.
Una vez trabajada la
madera  en su primera fase comence el
alambrado con aluminio para posicionar las ramas en su nuevo sitio.
También note que
inclinando un poco el árbol hacia la izquierda, éste mejora notablemente a
nivel de silueta y de colocación de las ramas. Sin inclinar, se veían casi a la
misma altura las ramas primera y opuesta.

En la parte trasera he
elevado la rama y luego la he bajado para disimular el gran espacio vacío
que queda entre las ramas bajas de la izquierda y el ápice.
También con pequeñas ramillas
he disimulado el ápice demasiado largo y tosco.
Ahora después de cambiar el
diseño de cabo a rabo limpiarecicatrices y dejare que el árbol se
recupere  a  base de abono, sol y calorcito.

El año que viene cambiare la
maceta. Las raíces dan sensación de ser profundas así que cualquier maceta no valdrá.
Creo que el trabajo ha
merecido la pena.  

Un saludo a todos y habrá
continuación.
Beti

Beti Andrés

Estudié Biología en la Universidad del País Vasco EHU-UPV. Muy pronto me enamoré de los Bonsáis y quise  trabajar , viajar y  aprender todo lo posible de los grandes maestros del bonsái. Y ahora, 30 años después, sigo aprendiendo y compartiendo todo lo que sé sobre cuidado y diseño de bonsáis. Desde Bonsai Center Sopelana colaboro con grandes maestros y a la vez amigos como Manuel Germade , Taiga Urushibata, entre otros.

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